Un renglón torcido

De haber ganado, el Hotel Museo Patria Chica estaría hoy virtualmente salvado a falta de ocho puntos por disputar en la Liga Iberdrola. Sin embargo, en el Centro de Tecnificación se encontró con un Rivas entonado y sabedor que en juego también estaba supervivencia en la Superdivisión femenina. Y esa necesidad le llevó a una gran victoria.

Por lo tanto, al conjunto de la Subbética le quedarán cuatro encuentros para asegurarse otra temporada en la máxima categoría, si bien es cierto que será una lucha sin cuartel porque en su situación hay, por lo menos, cinco adversarios más y la tarjeta de visita que le dejó el Rivas es toda una demostración de lo que se avecina.

En sí, el partido comenzó torcido. Y es que Marija Galonja, en el primer punto, se vio remontada ante Paula Medina. Porque la serbia se puso 2-0 por delante, pero la jugadora colombiana supo reaccionar y llevarse el primer punto.

Con todo, el enfrentamiento se niveló pronto. Yolanda Enríquez sacó a relucir su superioridad sobre Sofía Barba. Se impuso por 3-0 y reactivaba las opciones prieguenses de pensar en los puntos en litigio. Con el 1-1, Melinda Ciurcui tenía que lidiar con Ayane Morita, la japonesa diferencial del Rivas. Y ésta lo justificó con un 3-0.

Quedaba la bala del doble para llegar con opciones a la recta final del partido. Pero el dúo Morita-Medina provocó incomodidades en Ciurcui-Galonja hasta el punto de que su 3-1 del punto suponía el 3-1 en el partido. Y eso llevaba a Yolanda Enríquez a absorber toda la responsabilidad en el partido ante Medina. Pero la colombiana, en plan estelar, ganó a la granadina y certificó un triunfo que al Hotel Museo Patria Chica le complica la existencia.

Ahora, la agenda de la escuadra prieguense se toma un respiro en la Liga para pensar en la Copa de la Reina. Después quedarán los enfrentamientos ante Arteal, Narón, Cartagena y Alicante. Y ahí vendrá la oportunidad de enderezar el renglón torcido.