El pasado sábado, 9 de diciembre, tuvo lugar el tercer campeonato benéfico “Un juguete por una sonrisa”, organizado por la escuela de fútbol Kurtuba Sur en el IDM El Guadalquivir. Para disfrutar del evento, los asistentes acudieron con un juguete o material escolar en valor de entrada que será destinado a las familias más desfavorecidas de la zona sur de Córdoba. Nos hemos puesto en contacto con su coordinador, Juanjo Mora, el cual hace un balance muy positivo del campeonato “ha sido espectacular, es la tercera vez que se hace y cada año va a más, la afluencia de público fue mayor, los chicos se divirtieron mucho jugando y el comportamiento por todas partes fue sobresaliente”.
Cada año, esta cita, ve cómo va haciéndose hueco en un ajustado calendario dentro del fútbol base cordobés. “El incremento ha sido mayor incluso de lo que esperábamos, es de agradecer cómo la gente se vuelca en este tipo de iniciativas y colabora con nosotros. La recogida de juguetes y material escolar para los niños más desfavorecidos de la zona sur de la ciudad fue un éxito y es muy gratificante poder aportar nuestro granito de arena”.
En el plano deportivo, esta escuela tiene muy claro cuál debe ser la importancia como tal y protagonismo que debe tener. “Nosotros a nivel de competición como tal nos mantenemos al margen, jugamos con las demás escuelas y nos centramos en educar a los más pequeños con unos valores basados en el compañerismo o la solidaridad, entre otros, que el día de mañana puedan hacerse valer de ellos en su vida cotidiana. Una de nuestras premisas por ejemplo es evitar en la medida de lo posible la presión a la salida de balón para que no haya goleadas sin ir más lejos… entendemos que el nivel de competición como tal tienen tiempo en otras categorías superiores para ponerlo en práctica. Este año hemos notado un incremento de niños más que notorio, lo padres valoran el trabajo que hacemos con sus hijos”.
-¿Cómo es el día a día en la escuela Kurtuba Sur?
El día a día es muy gratificante, como sabes somos un club especial, es un gusto tratar con los chicos y ver como aprenden a disfrutar de su pasión y a la vez crecen como personas. Intentamos “aprovecharnos” por decirlo de alguna manera de su afición al fútbol para que lo practiquen divirtiéndose, conociendo a otros niños, respetándolos y aprendiendo una serie de valores muy importantes a estas edades.
Al margen del campeonato del pasado fin de semana, la escuela sigue trabajando en dar continuidad proyectos como la operación kilo, que este año como novedad instalará una sede más, siendo tres en lugar de dos como el año pasado, y nuevas metas como colaboración con la asociación contra el cáncer. “Estamos organizando un campeonato benéfico en el que todo lo recaudado en taquillas irá destinada a dicha asociación. Por otra parte, más a largo plazo, se está trabajando en algo mucho más ambicioso que ya irá saliendo y viendo la luz, no nos gusta hablar antes de que sea una realidad”.