Como una final, es el partido que afronta este sábado el Yosíquesé ante el CAM Enrique Soler de Melilla. Solamente el CB Cazorla y el propio equipo melillense tienen ya plaza asegurada para la fase final del grupo D de la liga EBA y aunque aún quedaría otra jornada por disputar, la victoria sería un paso de gigante para que el conjunto de Rafa Sanz consiguiera una de las otras dos plazas que quedan para seguir en la lucha por el ascenso. De hecho, si los resultados del resto de partidos acompañan (derrota de Huelva frente a Cazorla), la clasificación del Yosíquesé ganando a Melilla sería ya una realidad.
Así que lo primero es centrarse en el encuentro ante el Enrique Soler, pues como apunta el técnico del Yosíquesé "va a ser un partido difícil por la entidad del rival, por lo que hay en juego y por todo lo que queremos, pero es ilusionante al máximo. “
La ilusión del conjunto cordobés es máxima, están sobreponiéndose de forma “sorprendente” a todos los contratiempos que se están encontrando por el camino, sobre todo en las últimas semanas, en las que las lesiones han obligado a pasar por el quirófano a los jugadores Ángel López (fractura en su mano derecha consecuencia de un golpe fortuito en el partido frente al Medacbasket), y Rafa Blanco (rodilla). Por eso Rafa Sanz no escatima en elogios para los suyos, “un equipo con tanta gente joven, con jugadores en su gran mayoría cordobeses, es para estar orgullosos de vernos entre los mejores y luchando por seguir este sueño. Será complicado pero muy motivador"
En la ida, el CAM Enrique Soler, un conjunto, como muchos del grupo y de la liga EBA, plagado de extranjeros, se impuso por 77-73, lo que invita a “soñar” con la victoria, "en su campo estuvimos muy cerca de ganarles, hay que defender a buen nivel y controlar el rebote. Desde ahí comenzarán nuestras opciones para poder ganar a un equipo que tiene calidad y experiencia", apunta el técnico cordobés.
Desde el club se espera una jornada más la respuesta de la afición. Los más de 1000 aficionados de media por partido la convierten en la mayor del grupo D de liga EBA, así que Rafa Sanz la “convoca” de nuevo. El sexto hombre debe empujar más que nunca ante un Melilla que “quiere estar arriba, pero nuestra ilusión, nuestro deseo, es que este sueño se alargue. Vamos a luchar contra sus centímetros, contra su calidad, con nuestras armas. Si a eso añadimos el apoyo de la afición, vencer es posible."