¡Ay!, por el hondo callejón del luto
muge la pena y hunde su cornada
sobre el pecho redondo de la tarde
que junto al río sola se desangra.
Viene arrastrando el viento dolorido.
Viene el dolor y pide un poco de agua.
Y llega la amapola de una herida
como una puerta triste y ... leer más.