Sevilla: Carlos Ochoa da la única vuelta al ruedo de la tarde
21 de mayo de 2017 | Toros | patiodecuadrillas.com
Younes, mal con la espada, y Cadaval con un lote de menos posibilidades
El novillero Carlos Ochoa fue quien más se acercó al triunfo en la segunda novillada del abono sevillano. El madrileño dio la única vuelta al ruedo de la tarde en su primero. Por su parte, Andy Younes y Alfonso Cadaval se fueron de vacío, aunque el francés tuvo más posibilidad en su lote. Estuvo mal con la espada y eso limitó su balance. Cadaval tuvo el lote con menos posibilidades.
Se lidiaron novillos de El Freixo, bien presentados. Destacaron primero, tercero y cuarto.
Andy Younes, ovación tras aviso y silencio tras aviso.
Alfonso Cadaval, silencio tras aviso y ovación.
Carlos Ochoa, vuelta tras aviso y ovación.
Andy Younes demostró soltura con el capote en el novillo que abrió plaza. Después del segundo puyazo, Alfonso Cadaval hizo un quite y Younes replicó. El francés improvisó un bonito comienzo de faena con muletas ayudados antes de brindar desde los medios. Ligó bien las primeras series diestras en las que el novillo mostró buen son pero salió algo desentendido de la suerte. La faena bajó un poco por el lado izquierdo pero el francés volvió a la derecha y de nuevo se acopló, apurando las últimas embestidas. Terminó con manoletinas y mató de estocada y descabello. Fue ovacionado.
En el recibo de capa de Younes al segundo de su lote sobresalieron las dos medías de remate. Cadaval hizo en este novillo un quite por chicuelinas bien rematado con media. Younes comenzó la faena con tres pases cambiados en los medios a los que siguió una serie con la derecha en la que el novillo repitió y el novillero templó bien. Al natural le costó más cogerle el ritmo. Terminó la faena manejando con solvencia el toreo de cercanía con circulares invertidos y parones. Mal con la espada, perdió toda opción de triunfo.
Alfonso Cadaval se fue a recibir a su primero a portagayola y el novillo salió siempre suelto del capote, impidiendo el lucimiento. Mantuvo esa mansedumbre en banderillas y Cadaval brindó al público. Comenzó con bonitos muletazos y fue a más con la derecha en tres series bien ligadas. Cuando cogió la zurda el novillo dio un par de avisos y buscó la querencia. Hubo una serie final con la derecha y acabó su labor de pinchazo y estocada, siendo silenciado.
No pudo lucirse con el capote Cadaval en su segundo novillo, que echaba las manos por delante. En banderillas ya hizo amago de rajarse el de El Freixo y en la muleta embistió sin convicción. Cadaval estuvo firme en la primera serie y logró los mejores muletazos al natural hasta que el novillo se fue desentendiendo. Avanzada la faena, le sacó dos series con la derecha que tuvieron mérito. Remató su actuación con una buena estocada.
Carlos Ochoa recibió al tercero con faroles de rodillas. En la muleta se encontró con un novillo repetidor al que ligó dos buenas series con la derecha que hicieron sonar la música. Siguió por ese pitón sin muchas apreturas pero con la izquierda logró los mejores muletazos de la faena. En la siguiente serie sufrió un desarme y remató su labor con garra. Mató de estocada pero el novillo tardó en caer. Hubo petición de oreja pero el premio no fue concedido. Vuelta al ruedo.
Manso en los primeros tercios resultó el sexto. Ochoa no pudo lucirse con el capote. Mantuvo esa condición el novillo en la muleta y Ochoa le fue buscando las vueltas, intentando por todos los medios impedir su huida. Lo logró y le dio una serie buena, haciendo sonar la música. Después el novillo empezó a buscar las tablas y a volverse al revés y Ochoa no tiró la toalla, rematando una labor meritoria. Pinchazo y estocada perpendicular. Ovación.