El Cid hace lo mejor de la tarde y da una vuelta al ruedo en Sevilla
7 de mayo de 2014 | Toros | patiodecuadrillas.com.
Daniel Luque y Arturo Saldívar no lograron conectar con el público
9º Festejo de abono. Miércoles 7 de mayo de 2014.
El Cid ha hecho las faenas más destacadas de la tarde en Sevilla, dando una vuelta al ruedo después de torear al cuarto, en el que hubo petición de oreja para el torero de Salteras. Ha sido lo mejor de una corrida en la que Daniel Luque y Arturo Saldívar no lograron conectar con el público.
Se lidiaron tres toros de Garcigrande (tercero, quinto y sexto), dos de Domingo Hernández y uno (primero) de Jandilla. Bien presentados y de juego desigual.
El Cid, ovación y vuelta al ruedo.
Daniel Luque, silencio y silencio.
Arturo Saldívar, silencio y silencio.
Dos tercios de entrada en tarde de calor. Daniel Luque fue atendido en la enfermería de una herida en la parte posterior del muslo de 4-5 centímetros que no le impide continuar la lidia.
El primero de la tarde, de Jandilla, se prestó poco para el toreo de capa. El Cid lució más en el quite y Luque entró en su turno dejando gaoneras muy apretadas. La faena la empezó sin probaturas, logrando una buena primera serie. La segunda también fue ligada y con la tercera subió el tono de la faena. Fue lo mejor del trasteo. Por el izquierdo embistió con más brusquedad y problemas el de Jandilla y tuvo que desistir. Mató de estocada y descabello. Silencio.
Ninguna entrega en los primeros tercios tuvo el cuarto. En la muleta embistió bien en la primera serie, aunque al finalizar hizo amago de rajarse. En la siguiente, El Cid logró recoger la embestida del toro y sujetarla en una serie muy buena con la derecha. A partir de ese momento tuvo que buscar siempre al manso toro, pero logró meterlo y torearlo muy bien por la derecha. Fue una faena de mucho mérito con momentos de calidad que remató con buenos muletazos por bajo. Mató de estocada y el toro tardó en caer. Tuvo que descabellar. Vuelta tras petición.
El segundo de la tarde derribó al caballo de picar y en banderillas se lució Abraham Neiro, que saludó montera en mano. El toro fue protestado por falta de fuerza y Daniel Luque lo intentó por ambos pitones, haciendo lo mejor al natural y cuando ligó pases por alto con otros de pecho sin inmutarse, sufriendo una voltereta. Terminó con circulares con mérito. Pinchó. Ovación.
Luque lo intentó con el capote en el quinto, logrando algunos lances estimables. Brindó al público y en la muleta se encontró con un toro soso al que fue metiendo por el pitón derecho, pero sin lograr caldear el ambiente debido a la condición de su enemigo. Por el izquierdo fue peor. Mató de media. Silencio.
El tercero no humilló nada en los primeros tercios y en la muleta de Arturo Saldivar repitió, logrando el mexicano algunos muletazos por el pitón derecho más que estimables. Al natural el toro se vino más abajo y volvió a la derecha consiguiendo la mejor tanda que hizo reaccionar al público. La pena es que no tuvo continuidad. Pisó terreno de cercanía en el final de la faena y fue silenciado.
Saldívar corrió bien la mano en el sexto por el lado derecho, pero sin llegar al público. También lo intentó al natural, por donde el toro le avisó dos veces después de dibujar naturales de buen trazo y nula emoción. Insistió sin mucho sentido. Mató de media. Silencio.
El Cid ha hecho las faenas más destacadas de la tarde en Sevilla, dando una vuelta al ruedo después de torear al cuarto, en el que hubo petición de oreja para el torero de Salteras. Ha sido lo mejor de una corrida en la que Daniel Luque y Arturo Saldívar no lograron conectar con el público.
Se lidiaron tres toros de Garcigrande (tercero, quinto y sexto), dos de Domingo Hernández y uno (primero) de Jandilla. Bien presentados y de juego desigual.
El Cid, ovación y vuelta al ruedo.
Daniel Luque, silencio y silencio.
Arturo Saldívar, silencio y silencio.
Dos tercios de entrada en tarde de calor. Daniel Luque fue atendido en la enfermería de una herida en la parte posterior del muslo de 4-5 centímetros que no le impide continuar la lidia.
El primero de la tarde, de Jandilla, se prestó poco para el toreo de capa. El Cid lució más en el quite y Luque entró en su turno dejando gaoneras muy apretadas. La faena la empezó sin probaturas, logrando una buena primera serie. La segunda también fue ligada y con la tercera subió el tono de la faena. Fue lo mejor del trasteo. Por el izquierdo embistió con más brusquedad y problemas el de Jandilla y tuvo que desistir. Mató de estocada y descabello. Silencio.
Ninguna entrega en los primeros tercios tuvo el cuarto. En la muleta embistió bien en la primera serie, aunque al finalizar hizo amago de rajarse. En la siguiente, El Cid logró recoger la embestida del toro y sujetarla en una serie muy buena con la derecha. A partir de ese momento tuvo que buscar siempre al manso toro, pero logró meterlo y torearlo muy bien por la derecha. Fue una faena de mucho mérito con momentos de calidad que remató con buenos muletazos por bajo. Mató de estocada y el toro tardó en caer. Tuvo que descabellar. Vuelta tras petición.
El segundo de la tarde derribó al caballo de picar y en banderillas se lució Abraham Neiro, que saludó montera en mano. El toro fue protestado por falta de fuerza y Daniel Luque lo intentó por ambos pitones, haciendo lo mejor al natural y cuando ligó pases por alto con otros de pecho sin inmutarse, sufriendo una voltereta. Terminó con circulares con mérito. Pinchó. Ovación.
Luque lo intentó con el capote en el quinto, logrando algunos lances estimables. Brindó al público y en la muleta se encontró con un toro soso al que fue metiendo por el pitón derecho, pero sin lograr caldear el ambiente debido a la condición de su enemigo. Por el izquierdo fue peor. Mató de media. Silencio.
El tercero no humilló nada en los primeros tercios y en la muleta de Arturo Saldivar repitió, logrando el mexicano algunos muletazos por el pitón derecho más que estimables. Al natural el toro se vino más abajo y volvió a la derecha consiguiendo la mejor tanda que hizo reaccionar al público. La pena es que no tuvo continuidad. Pisó terreno de cercanía en el final de la faena y fue silenciado.
Saldívar corrió bien la mano en el sexto por el lado derecho, pero sin llegar al público. También lo intentó al natural, por donde el toro le avisó dos veces después de dibujar naturales de buen trazo y nula emoción. Insistió sin mucho sentido. Mató de media. Silencio.