La Real Federación Andaluza de Fútbol ha hecho público el acuerdo con dos nuevos gestores, que se unen al grupo de trabajo de Eduardo Herrera, se trata de los empresarios Antonio Gordo y José Miguel Salinas y su función más relevante será realizar funciones de asesoramiento integral a la presidencia de la RFAF, con especial énfasis en el programa de actividades con motivo de su Centenario en 2015.
José Miguel Salinas ha ostentado diferentes cargos políticos, entre los que destaca el de presidente de la Diputación de Córdoba y la vicepresidencia de la Junta de Andalucía, en cuanto al ámbito deportivo, hijo del primer presidente que llevó al Córdoba a Primera División, dirigió también el club en la última época de Prasa como máximo accionista, cediendo el testigo a Carlos González en verano de 2011.
P. ¿Cómo acoge su llegada a la Real Federación Andaluza de Fútbol?
R. De manera muy satisfactoria por el hecho de seguir vinculado al fútbol desde mi marcha del Córdoba C.F. El fútbol ha sido y es mi gran pasión, de manera que es un honor poder aportar al fútbol andaluz de la mano de su presidente Eduardo Herrera, con el que me une una buena amistad.
P. ¿Llega usted en un momento importante en la historia de la RFAF en puertas de la conmemoración de su Centenario en 2015?
R. La Real Federación Andaluza de Fútbol tiene un enorme componente de gestión con 150.000 fichas de jugadores y desarrolla múltiples tareas en su labor cotidiana en diversos ámbitos de actuación; eso a veces dificulta tener una visión estratégica del importante trabajo que lleva a cabo. El Centenario es un momento de oportunidades de mostrar la historia de nuestro fútbol andaluz; detrás del fútbol de élite y los goles, hay un mundo en torno al fútbol base que es espectacular por lo que hacen.
P. ¿Qué papel juega la RFAF en la sociedad andaluza, a la hora de inculcar valores en el fútbol de cantera?
R. La RFAF es una institución que, al igual que otras, no dan grandes titulares de prensa y sin embargo, reconozco que es una organización que tiene mucha influencia en la ciudadanía, especialmente en los jóvenes, de ahí que tengamos que hacer esfuerzos para sacarlos a la luz. Por ejemplo, su labor en materia de cooperación internacional que es desconocida, en muchos casos, y ayudan a países con necesidades. Es ahí donde debemos seguir trabajando.
P. Para los que no le conozcan, ¿cuál ha sido la vinculación a lo largo de los años de José Miguel Salinas con el mundo del fútbol?
R. El “virus” del fútbol me entró a los siete años cuando mi padre era vicepresidente del Córdoba y, en ese sentido, he vivido mi adolescencia en la casa del fútbol, lo que me dio un bagaje. Recuerdo que la Asociación de Veteranos del Córdoba C.F. en el año 97 se ofreció para portar el féretro de mi padre y especialmente desde entonces la conexión con el fútbol y, en concreto, con el Córdoba C.F. ha sido estrecha, hasta que en el año 2009 me proponen dirigir al Club en una transición que duró dos años, donde fuimos saneando al Club y mantuve en el cargo a un magnífico entrenador como Lucas Alcaraz.
P. ¿Cuál es su relación con el presidente de la RFAF Eduardo Herrera?
R. Debo reconocer que Eduardo fue mi “puente” de unión para restablecer las relaciones con la Real Federación Española de Fútbol y con su presidente Ángel María Villar, cuando era presidente del Córdoba C.F. Desde entonces, Eduardo Herrera y yo hemos tenido muchos contactos; es una persona que en sus años como presidente de la RFAF ha iniciado proyectos que en otros territorios no se hacen. Eduardo es una persona con un ojo siempre mirando al horizonte, tanto en valores y cooperación internacional, como en el papel social e institucional que tener la RFAF.