El Ateneo Cordobesista celebró su ya tradicional charla-coloquio

La charla-coloquio celebrada durante la tarde noche del pasado jueves en el Café-Bar Pedro contó una vez más con invitados de excepción. El encuentro, organizado por el Ateneo Deportivo Cordobesista 1954, estuvo marcado por la asistencia de Jesús León, presidente del Córdoba CF, que repasó las medidas puestas en marcha durante sus tres primeros meses al frente de la entidad blanquiverde y subrayó la importancia de poner el club de nuevo en manos del cordobesismo.

La tertulia tuvo su inicio a las 20.30h con las palabras de bienvenida que Antonio García Llacer y Jesús García Salmerón quisieron expresar en atención y agradecimiento a todos los presentes para, hechas las presentaciones, ceder el turno de intervención al resto de componentes de la mesa presidencial del acto. En referencia a la evolución del equipo en los últimos meses, tanto Antonio Rodríguez Carretero como Ricardo Rojas coincidieron en destacar la labor de unión social y el excelente trabajo del presidente por levantar a un club que, además de la mala dinámica en el plano deportivo, había visto cómo su tradicional comunión con la afición quedaba empañada por la gestión y la mala relación con el anterior propietario. Por su parte, el secretario del Consejo de Administración, Joaquín Zulategui, aprovechó para recordar que “el Córdoba es de todos”, manifestando la firme intención de la nueva directiva de devolverlo al lugar que se merece.

Le llegó, al fin, el turno de palabra a Jesús León. El máximo mandatario blanquiverde quiso dejar claro ante todos los asistentes que, pese a haber cursado un duro trayecto hasta cerrar la compra de la entidad, estamos ante una nueva etapa en la que el paso más importante ha sido cambiar la apatía y la energía negativa que rodeaba al Córdoba CF, algo vital para conseguir salvar la categoría. Tras revisar brevemente su paso por Sevilla, que califica como “su aprendizaje en el mundo del fútbol”, el montoreño fija como gran reto para el futuro, además del ascenso, hacer desaparecer sentimentalmente al Real Madrid CF y al FC Barcelona trabajando, sobre todo, con los más jóvenes e intentando, con ilusión, actitud y superación, fortalecer el progreso de la cantera.