4-0. El Córdoba vence al Ramón y Cajal, colista, sin pisar el acelerador

Un cuarto de hora hizo falta para comprobar que al Córdoba le han sentado perfectamente los polvorones y el turrón de chocolate, demostrando así que el traspié sufrido ante el Torreblanca fue solo eso, un traspié. Primero avisó Luque a los dos minutos del comienzo del partido, después fue Vera el que se plantó solo delante del portero y Luque, en el minuto 16, daba la razón al dicho de “a la tercera va la vencida” y ponía el 1-0 en el marcador. El gol comenzó con una bonita jugada colectiva de los blanquiverdes que se afeó tras el rechace del portero; el delantero cordobesista solo tuvo que empujar el balón a la red en el barullo que se creó dentro del área.

Si tuviéramos que elegir dos palabras que definiesen el partido visto hoy, serían barullo y control. La primera aparece definida por la Real Academia Española como “confusión, desorden, mezcla de gentes o cosas de varias clases”, y eso es exactamente lo que se produjo en los dos primeros goles locales. La defensa visitante, tremendamente desordenada, concedió demasiado a un equipo que no perdona los errores debido la calidad individual de sus jugadores. Luque, en la primera parte con el gol ya comentado, y Vera, en la segunda parte tras un saque de esquina, sentenciaban un partido que no tuvo mucha historia. El Córdoba fue muy superior ante el colista controlando de principio a fin el encuentro y convirtiéndose en dueño del balón sin discusión.

La sensación que trasmitía el equipo era que acabarían cayendo los goles tarde o temprano; la cuestión no era el cómo, sino el cuándo. El Balonmano Ramón y Cajal jugaba a lo que le dejaba el equipo cordobesista, que no era mucho, y en ningún momento hizo peligrar el resultado final. La defensa blanquiverde, por lo tanto, disfrutó de un partido relajado que permitió a los laterales prodigarse en ataque, especialmente Jesús. El lateral derecho no paró de subir su banda durante los 74 minutos que estuvo en el campo creando peligro constante, sobretodo en la primera parte.

También es preciso destacar la actuación de los dos interiores que salieron en la segunda parte, muy activos e intensos, que tuvieron como recompensa un gol para cada uno. Niko, por banda derecha, y Jordi, por banda izquierda, demostraron que el Córdoba tiene banquillo de sobra para seguir ahí arriba en la tabla. El primero anotó un gol “a lo Robben”, es decir: jugada por la diestra, acomodamiento a la siniestra y zurdazo a la base del poste. En cuanto al segundo, aprovechó un rechace del portero para empujar la pelota a puerta vacía; la jugada venía de un disparo de Vera en una contra donde había tres jugadores blanquiverdes por uno visitante.

Mención especial merecen el árbitro y el número 8, Zakaria. Resulta sorprendente que el Balonmano Ramón y Cajal solo recibiera una amarilla más que el Córdoba con la cantidad de faltas, “recaditos” y simulaciones que realizaron a lo largo de todo el partido. En ese contexto de futbol antiguo, sobresalió el centrocampista Zakaria, presente en la mayor parte de este tipo de jugadas y que debió ser expulsado en la primera parte tras pisar, intencionadamente, al 10 blanquiverde en la espalda cuando este estaba tirado en el suelo.

Con esta victoria, el Córdoba adelanta al Balón de Cádiz (a falta de que juegue este domingo al mediodía ante el San José) y se mantiene en lo alto de la clasificación. Por su parte, el Balonmano Ramón y Cajal sigue hundido en la tabla en decimoséptima posición. Tras este partido, ambos equipos dan por finalizada la primera vuelta y encaran la segunda desde dos perspectivas totalmente diferentes.

Córdoba 4 – 0 Balonmano Ramón y Cajal

Córdoba: Alcázar (Javi, 74’); Jesús (Del Rey, 74’), Medina, Soto (Moreno, 78’), Manu Romero; Montero, Nono, Sergio García (Jordi, 70’); Vera, Sergio Domínguez (Niko, 64’) y Luque.

Balonmano Ramón y Cajal: Guillermo; Salguero, Julio, Said, Yusef (Mohamed, 74’); Iván, Anuar, Zakaria; Yunes, Hamsa (Mustafa, 80’) y Landi (Hamza, 54’).

Goles: 1-0 (16’) Luque. 2-0 (56’) Vera. 3-0 (72’) Niko. 4-0 (86’) Jordi.

Árbitro: Joaquín Rodríguez Ruíz. Amonestó a Jesús y Sergio García del equipo local y a Zakaria, Miguel Arguelles y Julio del equipo visitante.

Incidencias: Miralbaida.