1-1. Figueroa y Balón de Cádiz firman tablas

11 de abril de 2015 | Liga Nacional | Rafael J. Cobos

Cordobeses y gaditanos empatan en un partido disputado donde ninguno de los dos se fue satisfecho con el arbitraje. El punto tiene más valor para los visitantes que para los locales

Pocas veces ocurre lo improbable, que David venza a Goliat; por eso, cuando ocurre, es tan bonito. Hoy tampoco fue así, pero casi. A pesar de ello, el Figueroa ha conseguido rascar un punto a un equipo que se codea con los gallitos de la categoría. Además, los locales rompen así su racha negativa de tres derrotas consecutivas, aunque sigue en esa zona de peligro constante. Como decía: no venció, pero casi.

Comenzó el pastorcillo David creyéndose igual o superior al gigantón Goliat. Con un claro 4-1-4-1 y una presión bastante adelantada, puso en aprietos en los primeros minutos al conjunto visitante. De hecho, fue en esos momentos cuando Juanma asestó una tremenda pedrada al soldado de la ciudad de Gat. Hay que decir que el gol llegó gracias a la perfecta puesta a punto de la honda de Damián. Pidieron fuera de juego, y quizás lo hubo, pero eso no importaba: David estaba demostrando que podía sacar algo de provecho.

Tras este primer golpe local, el gigante aletargado decidió mostrar porqué está ahí arriba en la clasificación. A pesar de que hubo algunos minutos de agitación donde el Balón de Cádiz estuvo cerca de empatar, el Figueroa consiguió neutralizar ese arrebato visitante y controló la ventaja de la que disfrutaba en la primera parte. Juanlu primero, con una gran parada, y el árbitro después, al no pitar un penalti sobre Panadero (muy discutido por la afición visitante, que no paró de tomarla con el linier) ayudaron a mantener las tablas en el marcador.

La segunda parte comenzó con Goliat asediando a los ejércitos de Israel o, mejor dicho, los ejércitos de Figueroa. Si bien es cierto que en la historia bíblica el asedio duró 40 días, al conjunto amarillo le bastó con 6 minutos de ataque para conseguir igualar el encuentro: una buena jugaba por banda izquierda terminó en los pies de José Carlos, que a la altura del punto de penalti empujó el balón a la red. David había sufrido un duro golpe: se había visto superior a su oponente, pero ya no defendía la victoria, sino el empate; y los gaditanos se venían arriba con todo. Había que resistir. Un punto, aunque jugasen en casa, adquiere un valor altísimo atendiendo a las pocas jornadas que restan por disputar.

El partido, finalmente, no daría para más: no hubo jugadas de excesivo peligro ni para unos ni para otros. Los jugadores del Figueroa lo habían conseguido: aguantar los ataques del rival durante cerca de 80 minutos y sacar algo de provecho ante uno de los potentes de la categoría. Con este empate, se pone fin a una racha de tres partidos seguidos perdiendo y se piensa ya en la visita a otro de los grandes de la competición: el Real Betis. Los chicos de Leonardo han demostrado que no hay rival pequeño y que pueden sacar puntos ante cualquier rival; el siguiente, los verdiblancos. Como dijo el Cholo: “si se cree y se trabaja, se puede”. La salvación está un punto más cerca.

Figueroa 1 – 1 Balón de Cádiz

Figueroa: Juanlu (Alberto, 46’), Diego Román, Lolo, Rafa Gómez (Carrascosa, 49’), Raúl, Agustín, Damián, Carlos Castillejo (Ángel Blanca), Moya (Mateusz, 88’), Manu Ruíz y Juanma (Juan Fuentes, 79’).

Balón de Cádiz: Juan Francisco, Luis Patiño (Antonio García, 54’), Christian, Hidalgo (Álex Benítez, 51’), Pablo, Josema, Carrasco (Carlos Bueno, 64’), Xavi, Panadero, Cantos (Moreno, 76’) y Álvaro Vega.

Goles: 1-0 (8’) Juanma. 1-1 (51’) Carrasco.

Árbitro: Alfonso Muñoz González. Amonestó a Raúl y Lolo por parte del Figueroa y a Luis Patiño, Álvaro Vega y Xavi por parte del Balón de Cádiz.

Incidencias: Figueroa.