Otra ocasión para cambiar el paso

Con todo prácticamente perdido y la Segunda B muy cerca, el Córdoba tiene 12 citas por delante para obrar otro milagro. De hecho, ante el Cádiz tiene otra oportunidad para cambiar el paso y agarrarse así a una ilusión en este tramo final liguero. Tras encadenar cinco citas seguidas sin ganar, los blanquiverdes, el peor equipo de este 2019, quieren conquistar su segunda victoria fuera de casa en el Ramón de Carranza (18:00). Un triunfo en tierras gaditanas lo acercaría a siete puntos del objetivo de la permanencia tras el revés del Lugo ante el Albacete en el Anxo Carro (0-3).

La derrota ante el Sporting (1-2) en El Arcángel de la anterior jornada dejó muchas heridas abiertas. El cordobesismo dijo basta. Ya no puede más. Harto de todo, pero aferrado a que los jugadores den ese paso hacia adelante y tiren de un carro como no lo han hecho hasta este momento. También es culpa de la nefasta gestión realizada por Jesús León. Sin embargo, ahora es hora de ver si es verdad que quieren sumar fuerzas y tirar hacia adelante a por el objetivo de la salvación. Si se dejan llevar, sería un duro trance para una afición cordobesista que no se merece ese cruel castigo.

Los blanquiverdes visitan el Carranza para medirse a un Cádiz que pelea por meterse en la zona de play off de ascenso a Primera División. De hecho, anda ahora mismo fuera de estos puestos de privilegio tras encadenar dos jornadas consecutivas sin ganar. Tras perder en el Martínez Valero ante el Elche, los gaditanos no pasaron del empate en casa ante el Lugo (1-1). Aunque llegue el colista, el mensaje que sale del vestuario local es que no se fían de la mala dinámica cordobesista, que acumula cinco citas sin ganar.

Para esta cita y tras una semana complicada en Córdoba, Rafa Navarro tendrá que variar de nuevo su once inicial por las bajas de Chus Herrero, Carrillo y Blati Touré. El técnico cordobés quiso enganchar a su equipo con una charla motivacional en el vestuario el pasado viernes. Es la hora de los valientes y de dejarse la piel por un CCF muy herido. Es el momento de luchar por una afición que no se merece caminar por la categoría de bronce. Sin embargo, eso lo deben demostrar los que salten al verde. De hecho, el cordobesismo sólo quiere ver cómo sus guerreros se dejan el alma por el escudo. Y en Cádiz tienen la primera oportunidad de cambiar el paso. En su mano está.