Caras largas y silencio tras el fiasco de Almendralejo

De mal en peor. El Córdoba, tras perder la gran final de este domingo en el Francisco de la Hera ante el Extremadura (3-0), se coloca a nueve puntos de la zona de permanencia. Además, la victoria del Nàstic ante el Albacete deja a los blanquiverdes como colistas. Los números no salen a un cordobesismo desilusionado que ve cómo su equipo se acerca a Segunda División B.

La Ciudad Deportiva acogió este lunes la primera sesión de la semana con vistas al choque del próximo domingo en El Arcángel ante el Sporting de Gijón (16:00). El entrenamiento estuvo marcado por las caras largas de todos los presentes en la instalación del Camino de Carbonell. También fue llamativo el silencio tras el doloroso revés de Almendralejo en una cita en la que el equipo no estuvo a la altura.

Con el revés ante el Extremadura, con el que perdió también el gol average, el CCF, que suma 22 puntos en 29 jornadas, tiene 13 citas por delante para obrar otro milagro como el del curso pasado. Sin embargo, ahora mismo las sensaciones no son como las del ejercicio anterior. De hecho, a estas alturas de la temporada 17-18, los blanquiverdes sumaban tres puntos más en su casillero y la distancia con la salvación era de ocho puntos, uno menos que en la actualidad.

Ahora es el turno de hablar de una vez en el campo y demostrar que esta plantilla quiere seguir en la categoría de plata la próxima campaña. De momento, visto lo visto en Almendralejo, el abismo está más cerca, y así lo ve un cordobesismo triste y hastiado de ver a su equipo otra vez con los mismos problemas del pasado. Eso sí, quedan 13 jornadas para optar a estar en Segunda División el próximo ejercicio.