El Ciudad de Lucena evita el pleno

La vigésima jornada, primera de la segunda vuelta, resultó bastante positiva para los intereses de los cuatro conjuntos cordobeses que militan en la categoría. El único equipo que no pudo hacerse con los tres puntos fue el Ciudad de Lucena, que sale de puestos de play-offs; mientras tanto, Salerm Cosmetics Puente Genil venció ante un gran rival a domicilio para seguir en segunda posición, el Pozoblanco ganó con lo justo al San Juan y vuelve a meterse en promoción, y el Almodóvar dio la sorpresa en casa ante el Lora.

Más detalladamente, y por orden de clasificación, Juanmi Puentenueva se mostró feliz por su “victoria trabajada en un campo difícil”. El entrenador del Salerm Cosmetics Puente Genil quiso recalcar que “ganar en Cartaya tiene un valor doble, porque es un campo donde muchos equipos se van a dejar puntos y, de no ser por sus últimos resultados, estaría arriba con nosotros”. En lo que respecta al desarrollo del encuentro, haciendo balance del partido, comentó que “tras una buena primera parte del equipo”, el Cartaya trató de empujar en la segunda, aunque “mostramos solidez defensiva trabajando bien a la contra para conseguir tres puntos muy importantes”.

Otro de los entrenadores que salió victorioso de la jornada pasada fue Rafa Carrasco, cuyo equipo volvió a la zona de play-offs dejada la semana anterior por la derrota ante el Ciudad de Lucena en el derbi. El técnico pozoalbense es consciente de que “después del gol, nos echamos a dormir”, aunque bien es cierto que “el contrario no nos creó peligro”. “Si hubiéramos puesto más intensidad, se podría haber ganado por más de un gol”, indicó, pero, al fin y al cabo, “lo importante era sacar los tres puntos, y se consiguieron”.

La sorpresa la protagonizó el Almodóvar, que volvió a reencontrarse con la victoria ocho jornadas después jugando en casa ante el Lora en un partido donde mostraron una “buena imagen”. “Estuvimos muy serios en todas las líneas”, comentó el entrenador carbulense, “solo cuando hicieron el 2-1 apretaron bastante”. Con estos tres puntos, el Almodóvar se permite coger algo de moral y tratar de ver el futuro con otros ojos. Preguntado por una posible reacción a tiempo de los suyos, Francisco Ledesma fue rotundo: “quedan muchos puntos en juego y hay que conseguir los máximos posibles; no es tarde para lograr salvarnos”.

Menos satisfecho acabó Francisco Reina, más por la labor arbitral que por la actuación de sus jugadores. Un partido donde “estábamos siendo superiores hasta la segunda amarilla de Naoki a falta de media hora, controlando el partido y buscando el segundo”, se acabó yendo al traste por tener que jugar “la última media hora con uno menos de forma muy injusta”. El entrenador lucentino se mostró “muy disgustado” por las dos tarjetas que recibió sus jugador, sobre todo por la segunda. Pese a todo, se queda con que “los jugadores hicieron un trabajo enorme, no se merecieron ese castigo”.