El Deportivo, obligado a vencer al Cádiz para mantener opciones

Recortar nueve puntos con la zona de permanencia en las seis jornadas que quedan de liga. Ése es el desafío del Deportivo Córdoba para el tramo cada vez más decisivo de la temporada y que arrancará este domingo a partir de las 12:30 frente al Cádiz en el pabellón universitario de la IDU Menéndez Pidal, un exilio forzado de Vista Alegre, que acoge el festival de videojuegos 'Play Córdoba'.

No hubo partido para el conjunto deportivista este pasado fin de semana pero sí para la guardameta Natali, que se proclamó subcampeona continental con Ucrania en la fase final del Europeo, disputado en Debrecen y donde perdió frente a España. El técnico Salvador Chía reconoce que "esta semana estuvimos pendientes de la Eurocopa, ya que la final la disputaron la selección española y Ucrania, donde juega una de nuestras porteras, que tuvo minutos, un hito que le ha servido para coger experiencia, seguir creciendo como jugadora y que al club nos vendrá seguramente muy bien para afrontar estos momentos clave que tenemos ahora al final de temporada, con partidos decisivos y podemos decir que seis finales por delante. Además, Natali ya volvió durante esta semana y lo ha hecho con energías renovadas, muy motivada y trabajando duro para dar lo máximo al club y sacar lo mejor de ella".

El preparador deportivista tiene claro que "estas seis jornadas que quedan se presentan como seis finales, empezando por la de este mismo domingo en el que tenemos la final más importante, donde no debemos fallar en lo que se presume como un partido trampa ante el Cádiz, que si bien son tres puntos muy importantes, estando como estamos a nueve puntos de la salvación y con los enfrentamientos directos en las próximas jornadas, cada encuentro tiene mayor importancia y, desde luego, tenemos que afrontarlo con la intención de no fallar y de sacar los tres puntos en juego de aquí al final del campeonato".

Chía se muestra satisfecho con la actividad de su plantilla en estos últimos quince días, ya que considera que han sido "dos semanas de muy buen trabajo, en las que hemos disfrutado también de algunos días de descanso para acabar de recuperar algunas jugadoras que estaban tocadas y que ya el lunes se sentía bien y en plena forma; no hemos dejado de trabajar, hemos estado preparando el partido ante el Cádiz a conciencia y, en definitiva, hemos tenido dos semanas muy buenas, donde he visto un gran compromiso y una predisposición encomiable por parte de las jugadoras".

El rival será el Cádiz, colista del grupo 3, y matemáticamente descendido a categoría andaluza tras acumular un pleno de 20 derrotas en 20 partidos, y al que las califales ya vencieron a domicilio en la primera vuelta por un contundente 0-7; pese a ello, el entrenador blanquiverde lo define como "un partido trampa en el que no podemos salir confiados en ningún momento; tenemos que salir a la pista como si nos enfrentáramos al líder, siendo conscientes de lo que nos jugamos y respetando al máximo al adversario. Como no sea así, como nos equivoquemos o como nos confiemos, nos podemos llevar una sorpresa y, al acabar el partido, tener un disgusto, que es lo que queremos evitar".