Una zaga en constante progresión

Dicen que todo equipo se construye en base a una sólido entramado defensivo. El Córdoba B de la 2013/14 no es una excepción. La salvación del filial comenzó con una dosis de intensidad que repercutió de manera directamente proporcional en la consecución de puntos. Tras la disputa de la jornada 17, y con el equipo farolillo rojo de la competición con 8 puntos, los cordobesistas ya habían encajado 29 tantos. Más de una vuelta después, y tras la visita del Arroyo CP al Nuevo Arcángel, los de Romero concluyeron la campaña con 45 puntos, 37 más que a comienzos del mes de diciembre.

Muchos han sido los integrantes de una zaga que se ha visto muy condicionada por los llamamientos del primer equipo. Así, Bernardo Cruz, Pinillos y Dani Espejo -disputó varios encuentros como lateral- han sido asiduos del hermano mayor, sobre todo en el último tramo de campeonato. Todo ello precipitó algo el debut de muchos defensores juveniles. Fueron los casos, por ejemplo, de José Antonio Castro, Fran Serrano y Antonio Lucena, los dos últimos indiscutibles en los últimos envites.

Por zonas, el lateral diestro fue propiedad de Néstor -era Puche- Campabadal y Cristian Márquez, quien aprovechó la marcha del sevillano y la ascensión al primer equipo del catalán para hacerse con el puesto. Pedro Santos y el citado Castro también hicieron su aparición por dicha zona. El siniestro, sin embargo, fue para Dani Espejo, Pinillos y Antonio Lucena, siendo éste último el inquilino más asiduo. El centro de la zaga, y siempre y cuando estuvieron disponibles, fue para Bernardo y Fran González. La llamada del primer equipo provocó que el menor de los Cruz se ausentara en más de una ocasión, circunstancia paliada con la presencia del cartagenero Gonzalo Verdú -también actuó de mediocentro- y Fran Serrano. El canterano, goleador por partida doble este ejercicio, ha sido uno de los grandes descubirmientos del final de temporada.

Mención especial merece Fran González. El cordobés -ha terminado la campaña jugando en el centro del campo- se ha alzado con el premio a la regularidad, ya que ha sido el jugador más utilizado del filial. Es el único integrante del plantel blanquiverde que ha sobrepasado la barrera de los 3.000 minutos. El zaguero ha disputado 35 partidos, 34 de ellos de titular, por lo que únicamente se ha perdido tres duelos, todos ellos debido a acumulación de cartulinas amarillas.