Lucena y Córdoba B buscan su propio 'Sábado de gloria'

El calendario ha querido que en plena Semana Santa haya un derbi. Lucena y Córdoba B buscarán su particular "Sábado de Gloria" para que el resto de la temporada no sea de pasión.  Los lucentinos tienen que recordar las sensaciones que se producen con la victoria después de siete semanas sin tenerlas. De no hacerlo, el final del campeonato seguiría afeándose y las opciones de Copa del Rey quedarían limitadas al mínimo. El filial cordobesista en caso de que gane lograría la salvación virtual, de no hacerlo la intriga se apoderaría de los últimos compromisos de los blanquiverdes. Un duelo con muchos ingredientes y que vuelve a darse en Lucena después de casi ocho años.

A la cita llegan los dos contendientes con dinámicas muy distintas. El Lucena en el peor momento de la temporada, el Córdoba B lanzado. Lo único que une a ambas escuadras son las bajas. En el bando local, Falete que también tuvo que pasar por el quirófano en la presente semana, recupera a Obregón que cumplió sanción la pasada semana. El resto de las ausencias, serán las ya consabidas de Clavero e Ismael, ambos lesionados. Por parte visitante, José Antonio Romero, podrá utilizar si así lo estima oportuno a Mendi y a Verdú que ya cumplió su castigo. Por contra,  Sillero, Bernardo, Pedro y Pinilos estarán con el primer equipo.

El colegiado designado para el partido ha sido el valenciano Sanchís Cambra que nunca ha dirigido al filial califal. Al Lucena por su parte, le ha arbitrado dos encuentros que se saldaron con derrota. En la presente temporada, tiene una media de 5,83 tarjetas por partido repartiéndose en 2,17 para el equipo local y en 3,67 para los visitantes. Una media similar a la de la pasada temporada y sensiblemente inferior a la temporada 10-11 donde mostró casi 7 por choque, algo que hizo en la temporada siguiente.