El filial y su nuevo rol

12 de mayo de 2014 | 1ª RFEF | FRAN HABAS

El Córdoba B, acabada la liga, continuará entrenando en pos de ayudar al primer equipo. El domingo, amistoso en Villaviciosa

La derrota ante el Arroyo del pasado domingo supuso el punto y final a la temporada oficial del Córdoba B. Undécimo clasificado y 45 puntos, bagaje con el que el filial blanquiverde ha finalizado la campaña de su debut en la categoría de bronce del fútbol español. A partir de ahora toca asumir un nuevo rol, ni mucho menos desconocido. El plantel, ni mucho menos, dejará de sudar en el Municipal de El Carpio. El conjunto de José Antonio Romero continuará entrenando, al menos, hasta que el primer equipo concluya su competición. El hecho de cubrir las necesidades de Albert Ferrer, motivo más que justificado para seguir al pie del cañón.

 

Tras la jornada de descanso del lunes, el Córdoba B entrenará martes y miércoles, para volver a descansar el jueves. El viernes, última sesión de la semana. El domingo, en lo que será el primer encuentro amistoso tras la liga, el cuadro califal se desplazará a la localidad de Villaviciosa para enfrentarse al titular de la localidad del Valle del Guadiato. La inauguración del nuevo estadio de césped artificial, motivo de la visita de los cordobesistas. No se descarta que se disputen más encuentros de este tipo de aquí a las vacaciones estivales.

 

La nota positiva de este inicio de semana la encontramos en la enfermería, la cual, momentáneamente, está huérfana. Cristian Márquez y Juan Guerra, últimos inquilinos de la misma, ya gozaron de minutos ante el Arroyo en el Nuevo Arcángel. El catalán fue titular; el sevillano saltó a la hierba en el segundo acto.