Derrota en el marcador, triunfo moral del CCF ante el Sevilla (0-1)

Victoria moral, derrota en el marcador. El Córdoba CF quedó apeado de la Copa del Rey por un Sevilla de Champions que sufrió sobre El Arcángel. Un gol de Ocampos, en el minuto tres de la segunda parte de la prórroga, dejó a los de Germán Crespo fuera de la siguiente ronda copera. Ni justo ni injusto, todo lo contrario y según como se mire. Los blanquiverdes jugaron en muchas fases del duelo de tú a tú a un Sevilla que aprovechó el único error defensivo cordobesista a lo largo de los 120 minutos de partido para lograr su pase ante un equipo que luchó hasta el pitido final. 

De inicio y aunque el Sevilla salió buscando poner en franquía el marcador por la vía rápida, el Córdoba se plantó en el campo exhibiendo orden, intensidad, buen manejo del balón y un enorme trabajo arriba para frenar la salida con balón de los sevillistas y encarar con rapidez a Dimitrovic cuando robaban. De esta forma, el primer acercameinto peligroso del partido lo protagonizó el Córdoba. Y fue un motivadísimo Simo el que se encontró con el meta sevillista tras recibir un pase de Casas. La presión y el trabajo blanquiverde coartó la posesión del esférico visitante, aunque trataban de hacerlo correr de izquierdas a derechas y al contrario, pero sin encontrar el pasillo necesario para percutir definitivamnete sobre Felipe Ramos o disparar con claridad. Un crecido y extramotivado Simo protagonizaba acciones ofensivas peligrosas enfilando el cuartod de hora de partido. En un caracoleó por la banda izquierda en el que dejó sentado a Montiel, tiró un centro que obligó a Dimitrovic a intervenir a una mano tras un cabezazo de Puga. 

El público se levantaba de sus asientos, el Córdoba estaba dando toda una lección de buen hacer. Javi Flores botó una falta lateral a la que José Cruz no llegó por muy poco; y de inmediato, Puga percutió por el costado derecho y sacó un duro disparo que repelió Rekik. El Sevilla comenzó a despertar o mejor dicho, a sacudirse de la presión que ejercía prácticamente a todo campo el Córdoba. Los de Julen Lopetegui, en el tramo final del primer acto, trató de sacar ventaja en el arcador, pero el meta Felipe Ramos los mantuvo a raya primero repeliendo un disparo de Idrissi, y después, viendo como salía muy ajustado a la madera un remate de Iván Romero; y justyo antes del descanso, deteniendo un cabezazo de Munir tras una falta lateral botada por Óscar Rodríguez.

Tras la reanudación, el Sevilla dio un paso al frente desde el inicio. Julen Lopetegui, que hasta el descanso había mostrado su descontento con lo que veía de su equipo por sus gestos y las órdenes que trataba de dar a sus jugadores sobre la marcha, realizó dos cambios, uno quizás obligado por las molestias de Gudelj, dando entrada a Diego Carlos; el otro, para dar mucha más mordiente al ataque de su equipo dando entrada a Ocampos. El Sevilla obligó al Córdoba a retroceder por la pujanza de todo el Sevilla y por la velocidad que imprimió en el arranque del segundo acto a todas sus acciones. Apareció el trabajo de José Ruiz y Ekaitz Jiménez en los laterales y sobre todo el de José Cruz y José Alonso, que se tenían que multiplicar con la aparición de muchísimos centros laterales del conjunto sevillista.

Superado el primer cuarto de hora con orden, contundencia, trabajo y convicción, el Córdoba comenzó a sacudirse el dominio sevillista. El desgaste arriba de Puga, Casas y Fuentes lo activó Germán Crespo con sus primeros cambios y dio entrada a Willy, Omar Perdomo y Luismi, dejando sólo en la zona de arriba a un extramotivado Simo. Nada más entrar, Willy disparó desde fuera del área y a punto estuvo de sorprender a Dimitrovic. El conjunto blanquiverde giró el sino del partido de nuevo y comenzó a mantener posesiones más largas de balón.

El partido entró en su tramo final con las espadas en todo lo alto y con el Córdobanjugando de tú a tú al Sevilla. Pero el ataque sevillista comenzaba a crear serio peligro. Munir y Ocampos tuvieron sendas ocasiones solventadas por la defensa cordobesista. Pero el Córdoba no quedaba atrás y Simo y Luismi también gozaron de sendas ocasiones, no le perdían la cara a un partido que se marchó a la prórroga. 

El Sevilla buscó de nuevo adelantarse en el marcador por la vía rápida, Munir y Rafa Mir percutían con peligro, pero la defensa cordobesista volvía a brillar taponando cualquier intento de disparo y, en última instancia, aparecía Felipe Ramos. Pero de nuevo el Córdoba resurgió y equilibró el dominio visitante. Incluso Willy pudo adelantar a los de Germán Crespo en el marcador. Todo varió en el arranque de la segunda parte de la prórroga. Estaba claro que el primer error cordobesista lo aprovecharía el Sevilla y así fue. Ocampos peleó un balón largo con José Alonso y ante la salida de Felipe Ramos marcó a puerta vacía. 

No dio por perdido el duelo el Córdoba y Luismi y Willy pudieron incluso lograr la igualada. Cierto que la prodigiosa intervención de Felipe Ramos evitó el segundo de un Sevilla que ya supo jugar a lo grande a favor de marcador y llegar al final de la eliminatoria con una victoria que le permite seguir su camino en la Copa del Rey y que deja a un Córdoba victorioso moralmente y que mostró de lo que es capaz ante uno de los rivales más poderosos actualmente del panorama nacional. Ahora, le toca luchar para conseguir el objetivo real del club, el aascenso.

Córdoba CF 0-1 Sevilla FC
0 - Córdoba CF: Felipe Ramos; José Ruiz, José Cruz, Alonso, Ekaitz Jiménez, Toni Arranz (Christian Delgado, 110'), Javi Flores, Puga (Luismi, 61'), Adrián Fuentes (Willy Ledesma, 61'), Simo (Ale Marín, 110') y Casas (Omar Perdomo, 69').
1 - Sevilla FC: Dmitrovic; Montiel, Gudelj (Diego Carlos, 46'), Rekik (Koundé, 91'), Augustinsson, Delaney (Joan Jordán, 37'), Óliver Torres, Óscar Rodríguez (Papu Gómez, 73'), Idrissi (Ocampos, 46'), Munir e Iván Romero (Rafa Mir, 66').
Gol: 0-1 (108') Ocampos.
Árbitros: Gil Manzano (extremeño). Amonestó a los locales Javi Flores, Toni Arranz y Christian Delgado; y a los visitantes Joan Jordán, Diego Carlos, Óliver Torres, Papu Gómez y Ocampos.
Incidencias: Encuentro correspondiente a la primera ronda de la Copa del Rey disputado en El Arcángel ante unos 15.000 espectadores.

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