Compuestos y sin Copa

12 de mayo de 2014 | 1ª RFEF | Javier Morales

El Lucena se desenvolvía bien en las jornadas finales. Hasta ahora, las últimas rectas de los campeonatos habían sido favorables a los intereses celestes. Una salvación en sobre la bocina en Cuenca, una clasificación para la Copa del Rey en Lorquí y el paso al play offs de ascenso gracias al gol average de la pasada temporada daban esperanzas para la última jornada en Granada. El Lucena era como un artifciero capaz de desactivar cualquier bomba para que la situación le fuese finalmente favorable. En Armilla, la bomba le explotó en las manos. El gol average dejó sin premio a los celestes.

En Granada se perdió y con la derrota la opción de entrar en Copa. No por la vía directa, porque los rivales Barakaldo y Alcoyano sumaron y por lo tanto terminaron con mejor puntuación que el Lucena incluso con una hipotética victoria. Sin embargo, el tropiezo si que tuvo sus consecuencias. El empate le habría hecho adelantar a la Balona que cayó derrotada con el Albacete. No se logró. Pero lo peor no fue eso. El punto más negativo del domingo para los de Falete fue que sabiendo que necesitaban puntuar para que el Melilla no los adelantase por el gol average, no fueron capaces de ello. Perder la posición con los norteafricanos se ha sido clave para quedarse sin premio. Ahora no cabe, salvo milagro, la opción de que los lucentinos fuesen invitados a la próxima edición de la Copa. Hay demasiados equipos por delante de los celestes.

Pese a la no clasificación para el torneo del K.O no se logró, hay otro factor que enfadó más a la afición. El recurso de Falete de adaptar a Pepe Díaz al lateral derecho no fue bien recibido por la parroquia celeste. La idea del técnico cordobés se entendió como un decreto para que Díaz  jugase sin importar la demarcación y no gustó.