474: Los minutos de la sequía

8 de abril de 2015 | 1ª RFEF | Javier Morales

La falta de acierto goleador con el balón en movimiento lastra al Lucena

Finalmente fue Pepe Díaz el que rompió la racha negativa de cara a la puerta contraria. Hasta que el cuco batió a Jon el pasado domingo, el Lucena acumulaba 474 minutos sin marcar en jugada. Los celstes no marcaban con el balón en movimiento desde el 22 de febrero cuando José Manuel remachó una jugada en Lepe para hacer el 2-1.

La falta de puntería ha costado cara al Lucena, aunque el precio podría haber sido bastante mayor de no ser porque se ha defendido bastante bien a balón parado. De hecho, en ese lapsus de tiempo los de Sefi llegaron a sumar 7 puntos. Si bien, la cifra podría haber sido bastante mayor si la fortuna de cara a portería hubiese acompañado. De hecho, como vamos a ver, los celestes podrían haber estado lejos de los puestos de descenso.

El primer partido en el que los celestes se quedaron sin marcar, fue en casa ante el Almería B. Ese duelo, fue el primero en el que se cayó derrtado en el Ciudad de Lucena y se puede decir que el resutlado fue ajustado a los méritos de ambos conjuntos.  La reacción al primer tropiezo en casa fue dos victorias consecutivas. Santacruz con un tanto de penalti decidió los partidos de El Palo y Balona.

Pero no siempre se tienen penas máximas a favor. Los de Sefi, que ya pudieron haber ganado los dos anteriores compromisos de manera más holgada, no sumaron más que un punto ante el Arroyo por no hacer gol. La igualada  a cero dejó más contentos a los visitantes ya que los locales pudieron obtener un botín mayor de haber perforado la meta de Facundo. Ocasiones hubo para ello. También se sucedieron en Cartagena pero con el mismo resultado en cuanto a goles a favor, en contra se encajó uno y los celestes acumularon un menos seis en puntos potenciales sumados y rivales directos obtuvieron cuatro que no debieron haber tenido.

Y contra el Córdoba B, pasó más de lo mismo. Pese a que se rompió el  maleficio pronto, se malograron oportunidades para haber aumentado la renta y el resultado final es de todos conocido.