El Pozoblanco se refuerza, a costa de debilitar todavía más al Peñarroya

El Pozoblanco comienza a dar forma al proyecto de la nueva temporada. En los últimos días se han conocido las renovaciones de Valentín, Pedro, Ángel Arévalo y Migue Márquez, a los que hay que sumar las primeras incorporaciones, que han llegado procedentes de Peñarroya: Antonio Carlos, Pedro Gallego e Ismael. El primero de ellos puede jugar como defensa central o pivote defensivo, Pedro Gallego se desenvuelve en el lateral derecho, en tanto que Ismael es un zurdo polivalente, que bien puede jugar de lateral o en la media punta. Tres hombres relevantes en el Peñarroya de la pasada temporada que pasan a reforzar a un rival directo.

Estas bajas han dejado en cuadro a un conjunto peñarriblense que tras la marcha de su entrenador de las dos últimas temporadas, Antonio Jesús Cobos, ha visto como ha comenzado a ver menguar sus efectivos. Así el propio Cobos se ha llevado a Azuaga a Jesús Bono, Juan Peñalta, Carlos y Porriño. A los que hay que sumar Alamillo, que se ha marchado a Alemania y Pablo Mogollón, que ya ha expresado su intención de no seguir jugando en el Peñarroya, por motivos de estudios. Con todas estas bajas, más las ya comentadas de los tres jugadores fichados por el Pozoblanco, lo cierto es que José González se encuentra un panorama desolador, en el que solo: Lalo, Toni, Sebi, Manu Durán y Juanjo siguen del pasado ejercicio, si bien este último también se encuentra pendiente de donde lo van a llevar sus estudios. Este hecho posiblemente haga replantearse sus iniciales intenciones, de apenas contar con cuatro o cinco jugadores de Córdoba.

A esto añadimos que el panorama futbolístico en Peñarroya se encuentra algo enrarecido, después de que todavía no se haya convocado la asamblea anual del club para conocer los datos de la pasada temporada. Ahora se rumorea que esta podría ser el día 12, ahí Manuel Fernández deberá además exponer las ideas de futuro que tiene para el club.