Nada más entrar al estadio, en el aire se respiraba la presión de un partido que no solo tenía en juego una simple victoria sino posiciones decisivas en la tabla clasificatoria. El sol quemaba el césped convirtiendo el campo en un anfiteatro romano donde tendría lugar un espectáculo digno de gladiadores. Ni el calor abrasador fue capaz de acallar los gritos de ánimo y los sonidos de instrumentos que las dos aficiones regalaban a sus respectivos equipos. Todos estaban preparados para presenciar una auténtica batalla.
Tras el primer saque, el Utrera empezó con un buen golpe, pues no dudaba en hacerse con el balón y atacar sin demora; sin embargo, el Ciudad Jardín no se lo puso demasiado fácil, pues había decidido defender su área con puños de hierro porque no iba a rendirse ante el camino del descenso.
Los ataques se multiplicaban y ante la sequía de goles comenzó una lluvia de faltas que provocó la lesión de Álvaro, del equipo local. La lucha entre los sevillanos y los cordobeses destacaba más por la intensidad y la pasión que por la brillantez del juego; el balón no se decidía a entrar en la portería de ningún equipo porque parecía sentir devoción por los largueros.
En el segundo asalto, los utreranos recargaron energías y comenzaron a demostrar sus ansias de ganar para alcanzar el paraíso de tercera división. El gol de los visitantes vino gracias a Juanjo en el minuto 59’, aunque fue precedido por una posible falta al defensa del Ciudad Jardín que, misteriosamente, el árbitro no pitó. Este sería el inicio de una serie de injustos sucesos para los locales, ya que todo en su juego parecía molestar al colegiado.
Los intentos del Ciudad Jardín para llegar a la portería rival fueron en vano, pues, tan solo unos minutos después del acierto del Utrera, fue víctima de un fuera de juego irreal. El esfuerzo máximo se observaba en cada una de sus jugadas que, por desgracia, no daban su fruto. A escasos diez minutos del final, Tena fue expulsado por una doble amarilla, a pesar de que esta fuese infundada por un error de apreciación del árbitro.
Finalmente, el Utrera consiguió erigirse entre los vítores de su afición como el vencedor en un partido que permitió cumplir sus sueños de ascenso y destrozar la esperanza – con la colaboración de un réferi oxidado− de un equipo contrincante que se dejó la piel en cada pase y golpe del balón.
Ciudad Jardín – 0 Utrera – 1
Ciudad Jardín: Maikel, Juanfran, Chechu (Juanqui 67’), Castilla (Carro 26’), Piñi, Álex (Tena 49’), Raúl, More, Álvaro (Álvaro 21’), Soto, Jorge.
Utrera: Juan Núñez, Manu Arcenegui, Manu Doblado, Jonathan, Leal, Juanjo, Jesús Benítez (Hong Gui 83’), Jesús Cruz, Alberto (Juanma 70’), Israel (Pedro 88’), Orozco (Dani 67’).
Goles: 0-1 (Juanjo 59’)
Árbitro: Manuel Terrón Illescas. Amonestó a los jugadores Soto, Tena, Álvaro y Juanfran del Ciudad Jardín y a Dani, Pedro y Juanjo del Utrera.
Incidencias: Idm Poniente - Campo Municipal